DÉCIMO ENCUENTRO DE JÓVENES ESTUDIANTES-PROFESIONALES
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El día sábado 29 de febrero se desarrolló en la casa de la Fraternidad Misionera Verbum Dei el X Encuentro de Jóvenes de la Misas en Español de Budapest, con el Lema ¡Haz eso y vivirás!
El encuentro contó con la participación de 24 jóvenes coordinados por la Hna. Barbarita y la Escuela de Apóstoles. Para dar inicio a las actividades todos cantamos e hicimos una oración. El día estuvo dividido en 4 partes, un trabajo grupal, Predicación y oración; conversatorio y la oración final delante de Jesús Eucaristía.
Cada uno de los 4 grupos que se formaron para la primera actividad, recibió una situación para la cual debía crear una dramatización del escenario en el cual demostraban una respuesta basada en el amor y una basada en la ausencia de amor. Los escenarios presentados a cada grupo se referían a la familia, las relaciones de pareja, el trabajo y las personas necesitadas. Durante la presentación los participantes pudieron demostrar sus dotes teatrales mientras presentaban situaciones de la vida real en forma divertida. ¡La verdad, la pasamos divertido!
La charla que nos dieron, hablaba de las formas en cómo el amor es visto en la sociedad actual y en cómo nosotros como cristianos tenemos la mayor muestra de amor que es Jesucristo. Amor que fortalece nuestro amor por Dios, fortalece nuestras relaciones con los demás, ofrecer un amor más auténtico y maduro; Amor que nos hace amarnos bien a nosotros mismos para amar a los demás bien. Luego en forma personal reflexionamos sobre la lectura del Buen Samaritano (Lucas 10, 20-35) La tarde continuó luego de un esperado (y muy rico) almuerzo y a continuación un conversatorio sobre las preguntas planteadas a la Lectura de Lucas.
El día entero estuvo lleno de música, conversaciones entretenidas, reflexiones profundas y sobre todo de un encuentro personal e íntimo con Jesús. Cada uno tuvo su propia experiencia y aprendizaje. Personalmente, este encuentro fue muy enriquecedor porque pude fortalecer mi relación con Dios y plantearme varios propósitos para esta cuaresma. La lección más grande para mí fue recordar que ser feliz es más simple de lo que pensamos, cuando amamos a Dios con todo nuestro corazón, con toda nuestra alma y con toda nuestra mente y al prójimo como a nosotros mismo, vamos a encontrar la verdadera felicidad.
El encuentro contó con la participación de 24 jóvenes coordinados por la Hna. Barbarita y la Escuela de Apóstoles. Para dar inicio a las actividades todos cantamos e hicimos una oración. El día estuvo dividido en 4 partes, un trabajo grupal, Predicación y oración; conversatorio y la oración final delante de Jesús Eucaristía.
Cada uno de los 4 grupos que se formaron para la primera actividad, recibió una situación para la cual debía crear una dramatización del escenario en el cual demostraban una respuesta basada en el amor y una basada en la ausencia de amor. Los escenarios presentados a cada grupo se referían a la familia, las relaciones de pareja, el trabajo y las personas necesitadas. Durante la presentación los participantes pudieron demostrar sus dotes teatrales mientras presentaban situaciones de la vida real en forma divertida. ¡La verdad, la pasamos divertido!
La charla que nos dieron, hablaba de las formas en cómo el amor es visto en la sociedad actual y en cómo nosotros como cristianos tenemos la mayor muestra de amor que es Jesucristo. Amor que fortalece nuestro amor por Dios, fortalece nuestras relaciones con los demás, ofrecer un amor más auténtico y maduro; Amor que nos hace amarnos bien a nosotros mismos para amar a los demás bien. Luego en forma personal reflexionamos sobre la lectura del Buen Samaritano (Lucas 10, 20-35) La tarde continuó luego de un esperado (y muy rico) almuerzo y a continuación un conversatorio sobre las preguntas planteadas a la Lectura de Lucas.
El día entero estuvo lleno de música, conversaciones entretenidas, reflexiones profundas y sobre todo de un encuentro personal e íntimo con Jesús. Cada uno tuvo su propia experiencia y aprendizaje. Personalmente, este encuentro fue muy enriquecedor porque pude fortalecer mi relación con Dios y plantearme varios propósitos para esta cuaresma. La lección más grande para mí fue recordar que ser feliz es más simple de lo que pensamos, cuando amamos a Dios con todo nuestro corazón, con toda nuestra alma y con toda nuestra mente y al prójimo como a nosotros mismo, vamos a encontrar la verdadera felicidad.
Fernanda Ramos Díaz | |
Participante del Grupo de Jóvenes de Misas en español. |