Católicos de todas las lenguas llenaron la Basílica en la Misa de las Naciones
Una de las principales preocupaciones
de un migrante es ¿cómo voy a vivir mi fe en un país donde no se habla mi
idioma? Ya que es muy difícil comunicar emociones en una segunda lengua, sin
embargo en Budapest, para la iglesia universal, eso no es impedimento y cada
año queda demostrado en “La misa de las
naciones”, donde se congregan cientos de católicos.
Feligreses de toda lengua, raza y
nación se unen en esta misa que se celebra una vez al año para congregar a
todos aquellos que viven la fe cristiana en su propio idioma en la ciudad de
Budapest.
Con los trajes típicos de cada país y
ondeando sus banderas, los vietnamitas, polacos, franceses y los
hispanohablantes de Costa Rica, México, Venezuela, Chile, Perú, Ecuador,
Bolivia, Argentina, Colombia y por supuesto Hungría llenaron la Basílica de San
Esteban.
Las lecturas se hicieron en vietnamita,
polaco, francés y español y la homilía del Obispo Gábor Mohos, fue efectuada en
húngaro y proyectada en el idioma más común entre todos como lo es el inglés.
El obispo dijo que viniendo de
distintos países todos teníamos distintas perspectivas de cómo debe ser la
sociedad, basada casi siempre en nuestras costumbres y habilidades
particulares, cuando la verdad es que debemos hacer una comunidad basada en el
evangelio. “Debemos tener la perspectiva de Dios, es decir, la perspectiva del
amor”.
La misa donde participaron una docena
de sacerdotes y acólitos, se caracteriza por la alegría de sus canciones en
diferentes idiomas e instrumentos y todos se unen en torno a la Eucaristía.
La misa se hizo posible, gracias a la
autorización y beneplácito del Cardenal Péter Erdő, arzobispo de Esztergom-Budapest).
Leyenda: Los trajes típicos y banderas, brindaron colorido a la festividad.
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Budapest, 23/09/2023
